Sería buenísimo que mis alumnos conocieran estos detalles, como cultura general..... Sin quitar méritos a los logros de Rudolf Diesel, inventor del motor que hoy lleva su apellido, ni a las revolucionarias teorías físicas de Albert Einstein, el personaje a quien la revista Time designó “Hombre del Milenio” fue Johannes Gutenberg. El perfeccionamiento que hizo de la imprenta de tipos móviles permitió que toda clase de publicaciones llegaran a un amplio público. Mientras que un monje podía tardar hasta tres años en hacer una copia de la Biblia, Gutenberg imprimió 180 biblias en tan sólo un año. Cuando Thomas Alva Edison creó la lámpara incandescente, materializó un deseo: encontrar una fuente de luz alternativa a la llama viva. Con excepción de él mismo, casi nadie creyó que el invento que le daría fama y fortuna tendría éxito. A lo largo de los 84 años que duró su vida, el Mago de Menlo Park obtuvo un total de 1.093 patentes, 389 de ellas relacionadas con la energía eléctrica. El 4 de septiembre de 1882, las lamparitas iluminaron por primera vez la calle Pearl de Nueva York, y el sueño de Edison de llevar luz a la vida del hombre se hizo realidad. El sueco Nils Bohlin, quien al principio fue contratado como ingeniero de seguridad de Volvo y luego fue nombrado jefe del departamento de seguridad vehicular, inventó el cinturón de seguridad de tres puntos de anclaje, en 1959. En aquel tiempo se usaban cinturones de dos puntos, que mantenían a los pasajeros en los asientos, pero a menudo les ocasionaban lesiones internas graves. Los ingenieros Robert Kearns y Eugene Houdry también aportaron inventos a esta industria: los limpiaparabrisas intermitentes y el convertidor catalítico, respectivamente. Leonardo da Vinci es sin duda el hombre maravilla de la historia humana. No sólo pasó a la posteridad como el pintor de La Gioconda, o Mona Lisa, sino que, de haber existido las tarjetas de presentación en Italia en el siglo XV, la suya habría incluido también los títulos de ingeniero, científico, escultor, escritor y músico, por citar sólo algunos de sus talentos. Entre muchas otras cosas, inventó un submarino para un solo hombre, un bote de pedales y un paracaídas que, por lo que hoy sabemos, definitivamente habría funcionado. El hormigón y los ladrillos huecos son esenciales para construir los edificios modernos, pero el material de construcción más popular son los pequeños bloques de plástico patentados en 1958 por el inventor danés Ole Kirk Kristiansen. En el transcurso de los últimos 50 años, la empresa Lego ha vendido más de 180.000 millones de bloques. En 1908, Melitta Bentz estaba harta de encontrar sedimentos en el fondo de la última taza de café que salía de su olla. Para resolver el problema, tomó un pedazo de papel secante, le dio forma de embudo y lo utilizó para atrapar la borra. Con el tiempo, la idea ostensiblemente sencilla de esta mujer alemana la llevó a fundar una enorme empresa de filtros.
No fue un investigador de la policía, ni un psicólogo especializado en criminología, ni tampoco un médico forense quien ayudó a atrapar a Harvey Crippen en 1910, sino la máquina de telegrafía inalámbrica inventada por Guglielmo Marconi. Crippen, nacido en los Estados Unidos, había asesinado a su esposa en Londres y quería escapar a Canadá en el buque de vapor SS Montrose. El capitán lo reconoció y usó el nuevo dispositivo para dar aviso a la policía. Un inspector de Scotland Yard detuvo a Crippen en Montreal, antes de que tuviera oportunidad de desembarcar.
Sería buenísimo que mis alumnos conocieran estos detalles, como cultura general.....
ResponderBorrarSin quitar méritos a los logros de Rudolf Diesel, inventor del motor que hoy lleva su apellido, ni a las revolucionarias teorías físicas de Albert Einstein, el personaje a quien la revista Time designó “Hombre del Milenio” fue Johannes Gutenberg. El perfeccionamiento que hizo de la imprenta de tipos móviles permitió que toda clase de publicaciones llegaran a un amplio público. Mientras que un monje podía tardar hasta tres años en hacer una copia de la Biblia, Gutenberg imprimió 180 biblias en tan sólo un año.
Cuando Thomas Alva Edison creó la lámpara incandescente, materializó un deseo: encontrar una fuente de luz alternativa a la llama viva. Con excepción de él mismo, casi nadie creyó que el invento que le daría fama y fortuna tendría éxito. A lo largo de los 84 años que duró su vida, el Mago de Menlo Park obtuvo un total de 1.093 patentes, 389 de ellas relacionadas con la energía eléctrica. El 4 de septiembre de 1882, las lamparitas iluminaron por primera vez la calle Pearl de Nueva York, y el sueño de Edison de llevar luz a la vida del hombre se hizo realidad.
El sueco Nils Bohlin, quien al principio fue contratado como ingeniero de seguridad de Volvo y luego fue nombrado jefe del departamento de seguridad vehicular, inventó el cinturón de seguridad de tres puntos de anclaje, en 1959. En aquel tiempo se usaban cinturones de dos puntos, que mantenían a los pasajeros en los asientos, pero a menudo les ocasionaban lesiones internas graves. Los ingenieros Robert Kearns y Eugene Houdry también aportaron inventos a esta industria: los limpiaparabrisas intermitentes y el convertidor catalítico, respectivamente.
Leonardo da Vinci es sin duda el hombre maravilla de la historia humana. No sólo pasó a la posteridad como el pintor de La Gioconda, o Mona Lisa, sino que, de haber existido las tarjetas de presentación en Italia en el siglo XV, la suya habría incluido también los títulos de ingeniero, científico, escultor, escritor y músico, por citar sólo algunos de sus talentos. Entre muchas otras cosas, inventó un submarino para un solo hombre, un bote de pedales y un paracaídas que, por lo que hoy sabemos, definitivamente habría funcionado.
El hormigón y los ladrillos huecos son esenciales para construir los edificios modernos, pero el material de construcción más popular son los pequeños bloques de plástico patentados en 1958 por el inventor danés Ole Kirk Kristiansen. En el transcurso de los últimos 50 años, la empresa Lego ha vendido más de 180.000 millones de bloques.
En 1908, Melitta Bentz estaba harta de encontrar sedimentos en el fondo de la última taza de café que salía de su olla. Para resolver el
problema, tomó un pedazo de papel secante, le dio forma de embudo y lo utilizó para atrapar la borra. Con el tiempo, la idea ostensiblemente sencilla de esta mujer alemana la llevó a fundar una enorme empresa de filtros.
No fue un investigador de la policía, ni un psicólogo especializado en criminología, ni tampoco un médico forense quien ayudó a atrapar a Harvey Crippen en 1910, sino la máquina de telegrafía inalámbrica inventada por Guglielmo Marconi. Crippen, nacido en los Estados Unidos, había asesinado a su esposa en Londres y quería escapar a Canadá en el buque de vapor SS Montrose. El capitán lo reconoció y usó el nuevo dispositivo para dar aviso a la policía. Un inspector de Scotland Yard detuvo a Crippen en Montreal, antes de que tuviera oportunidad de desembarcar.